La Importancia de la Estimación en el Cierre Contable

Normalmente se asocia la contabilidad a documentos tangibles como la recepción de facturas, extractos bancarios, contratos y otros documentos de diversa índole que poco dejan al azar, pero, sin embargo, existe una parte dentro de cada cierre contable donde la experiencia de los administradores entra en juego para poder incluir una serie de movimientos de gasto o ingreso que faltan y poder estimarlos con la mayor exactitud posible.

Según las normas de contabilidad, los estados financieros de una sociedad deben reflejar, lo más fielmente posible, la situación real de la empresa a la fecha de cierre (normalmente prestando mayor importancia al cierre del ejercicio fiscal). Es en este periodo, cuando muchos administradores deben realizar un profundo ejercicio de revisión y estimación ya que el impacto de algunas provisiones puede terminar teniendo un gran impacto en el resultado del ejercicio contable. En este articulo vamos a repasar los tipos de provisiones más comunes que solemos encontrarnos de manera más recurrente a la hora de realizar los cierres contables de nuestros clientes.

  • Provisiones de Bonus y pagas extras:

Esta provisión se suele incluir al final del ejercicio cuando, una vez tenemos los datos definitivos de cómo ha ido el ejercicio, se decide por la dirección si los empleados, recibirán bonus o una paga extra adicional derivada del resultado de la empresa durante el año.

  • Provisiones de Auditoria:

Si la Sociedad es revisada por una auditoria, ya sea por estar obligada a ella o hacerla de manera voluntaria, es importante saber los honorarios de esta ya que, aunque la auditoria se haga normalmente una vez finalizado el ejercicio, los fees hacen referencia a la revisión del periodo cerrado y, por tanto, deben ser incluidos como un gasto del ejercicio.

  • Provisiones de facturas pendientes de recibir:

Este tipo de provisión suele ser la más habitual. Se incluye una provisión por gastos que hemos pagado pero que a la fecha del cierre no hemos recibido la factura. Un ejemplo de esto suele darse en recibos domiciliados, donde nos cargan por el banco el importe del servicio antes de recibir la factura del proveedor.

  • Provisiones por impuesto de Sociedades.

Un gasto bastante significativo suele ser la cuantía a pagar por el impuesto de Sociedades, recordemos que este impuesto se presenta 6 meses después del cierre del ejercicio por lo que resulta vital hacer una estimación lo más ajustada posible a la realidad ya que como en el caso de la auditoría, se trata de un gasto correspondiente al ejercicio cerrado y, por tanto, debe imputarse a ese periodo, adicionalmente sirve de aviso para prever el importe a pagar por dicho impuesto.

  • Provisiones de dudoso cobro de clientes:

Al final del ejercicio, las Sociedades, deben estimar cuales de los clientes que tienen facturas pendientes de pago pasan a ser clientes que tengan riesgo de impago. Para estos casos se suele hacer una estimación de aquellos clientes que se consideran incobrables, bien por dificultades económicas, extinción de la Sociedad que nos debe dinero o por diversos motivos.

  • Provisiones por Imdenizaciones o litigios:

Muchas veces al cierre del ejercicio las Sociedades tienen pendiente alguna indemnización por despido o pueden tener un litigio abierto del que no saben el resultado. En estos casos es importante que la Sociedad estime y reserve una serie de fondos para poder hacer pago a estas posibles contingencias futuras o bien estime el posible ingreso a recibir.

  • Provisiones por ingresos esperados:

En ocasiones, debido al sector en el que opera la sociedad, se pueden dar situaciones en las que se estime un ingreso que se obtendrá a ejercicio vencido pero que hace referencia a dicho periodo, bien por evolución del mercado, aplicación de IPC u otros índices, los propios contratos o acuerdos de la sociedad con sus clientes, etc. Por lo que será de vital importancia también, añadir dicha provisión al cierre.

  • Ingresos anticipados:

En este caso, se trata de ingresos contabilizados en el ejercicio que se cierra y corresponden al siguiente y figurarán, por tanto, en el pasivo del balance. Hablamos, por ejemplo, de facturas emitidas cuyo devengo ocurrirá en ejercicios posteriores.

  • Obra en curso:

Existen determinadas particularidades contables en aquellas adaptaciones sectoriales del PGC como es, por ejemplo, el caso de empresas constructoras, donde la problemática contable más común se refiere al tratamiento de gastos e ingresos que se extienden durante la duración de un proyecto que puede abarcar más de un ejercicio. Se torna por tanto fundamental el cálculo de la obra en curso de cara a la elaboración de la cuenta de resultados.

 

Como hemos podido ver, el cierre del ejercicio es un momento complicado ya que depende de como se incluyan esta serie de estimaciones pueden tener un impacto positivo o negativo en los ejercicios futuros. Si bien, es verdad que estas estimaciones se hacen en base a la experiencia y a los sectores de cada empresa, es ciertamente difícil poder calcular con exactitud matemática cuales serán los gastos futuros, pero si es importante tener una idea de los costes o ingresos que nos faltan por incluir en la contabilidad para intentar dar la imagen más fiel posible a una fecha.

Por último, destacar que de cara a la Agencia Tributaria y en particular a la preparación del impuesto de Sociedades, algunas de las provisiones de gasto anteriormente descritas no son deducibles. Para estar seguro de cuáles pueden ser deducibles y cuáles no, recomendamos la consulta con un fiscalista, ya que podemos encontrarnos con que el resultado contable de una Sociedad no coincida con el resultado de cara al impuesto de Sociedades